FREDDY: CACHORRO CON LEISHMANIA
Información
Nombre del animal: FREDDY
Fecha de la intervención: 21/12/2017
Veterinario/s que han intervenido: PEDRO SUAY
N
uestra zona geográfica es un área endémica en Leishmaniosis. Muchas veces nos enfrentamos a un reto diagnóstico ya que los síntomas clínicos con perros afectados con Leishmania pueden variar significativamente.
En este caso, Freddy ha sido todo un reto.
Freddy llegó a consulta con cuatro meses, tras ser adquirido con dos vacunas hexavalentes. Tras finalizar con nosotros su pauta de vacunación, de pronto dejó de ser el cachorrito feliz y simpático que repartía besos a todo el mundo a convertirse en un cachorro triste, apático, con dolor articular.
Con tan solo 5 meses Freddy no podía moverse con normalidad. Nuestra sorpresa fue que al hacerle un test LEA (enfermedades parasitarias) dió muy positivo a Leishmania. Comenzamos el tratamiento tras mandar al laboratorio todas las pruebas y poder clasificar la leishmania de Freddy. Existen 4 clasificaciones en perros positivos a Leishmania que viven en zonas endémicas.
Grupo 1: perro sano no infectado. No ha estado en contacto con el parásito (sin signos clínicos, sin alteraciones clinicopatológicas, serología negativa, PCR negativa).
Grupo 2: perro infectado aparentemente sano. Ha estado en contacto con el parásito y se ha infectado, no presenta signos clínicos ni alteraciones clinicopatológicas, serología negativa o positiva (niveles bajos o medios) y PCR positiva o negativa.
Grupo 3: perro enfermo (leishmaniosis clínica). Ha estado en contacto con el parásito, se ha infectado y ha desarrollado signos de enfermedad y/o alteraciones clinicopatológicas, serología positiva y PCR positiva.
Grupo 4: perro vacunado con signos de enfermedad compatible con Lcan. Perro previamente vacunado y que ha desarrollado signos clínicos y/o presenta alteraciones clinicopatológicas compatibles con la enfermedad con una serología positiva. En este caso debería tratarse como un perro clínicamente sospechoso en el que el valor de la serología no es útil para el veterinario clínico.
Freddy seguía sin mejorar a pesar de todo el tratamiento contra la Leishmania por lo que tuvimos que mandar pruebas al laboratorio donde se detectó la presencia de Neospora y Toxoplasma con unos títulos altísimos.
Con el tratamiento médico adecuado Freddy volvió a ser el cachorro que era, dándonos lametazos y correteando por la clínica.
Gracias a su estupenda familia por confiar en nosotros. Ha sido un gran reto diagnóstico con un final feliz.
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