FALLAS: una fiesta maravillosa para algunos y terrorífica para otros.

D urante esta semana fallera las consultas sobre etología se disparan en nuestra clínica. Muchos de vosotros nos habéis comentado que vuetras mascotas sufren episodios de ansiedad con taquicardia, taquipnea, temblores, apatía o incluso vómitos por estrés.

Es importante en animales adultos comenzar el tratamiento a finales de febrero, para darle tiempo a los fármacos a alcanzar su máxima eficacia durante las fallas.

El periodo de adaptación a los ruidos tan marcados suele ser durante el crecimiento del cachorro, por lo que la socialización y acostumbrarse a los petardos deberíamos hacerlo entre las tres semanas y tres meses de edad. Durante este periodo, el animal está en su pauta vacunal por lo que es importante pasear al cachorro en brazos, sin juntarse con otros canes, paseándolo por zonas con tráfico y zonas pobladas donde el nivel acústico sea más elevado.

Una vez instaurado el problema existen diversos protocolos y fármacos que dependerán del grado de ansiedad de cada mascota. Podemos empezar por calmantes naturales, para reducir el nivel de cortisol en sangre y ansiedad. Existen collares de feromonas (6%) que liberan diariamente estas sustancia natural para apaciguar al animal, sin presentar ningún efecto secundario. Son muy útiles además para ayudarnos en el tratamiento de la ansiedad por separación, disminuir el ladrido, disminuir la agresividad y para que en términos generales el animal se encuentre más "contento".

Subiendo de rango en los fármacos, hay animales que necesitan ansiolíticos durante la semana fallera más fuertes. Nuestra elección es un gel que se deposita en la mucosa oral, que se absorbe en pocos minutos y proporciona al animal un estado de tranquilidad. Además hay animales que lo pasan tan mal que requieren antidepresivos prescritos por nuestros veterinarios, semanas antes de la temida semana.

Además de todos los fármacos, collares, spray de feromonas, difusores... es importante que nuestras mascotas en casa dispongan de un refugio de fácil acceso donde se sientan cobijados, seguros y felices. Podemos añadir en estos rincones (alejados de las ventanas y en el lugar más insonorizado de la casa), además de las feromonas juguetes como los Kongs donde podemos introducir premios (esto solo funciona en animales que no tengan un grado de ansiedad muy elevado), para estimularlos y entretenerlos, desviando su atención.

En casos muy graves recomendamos si el propietario tiene la posibilidad, alojar al animal lejos de los núcleos urbanos.

¡Venga amigos! ¡Solo quedan 5 días! Mucho ánimo a todos los papis de perros con miedo, ¡estamos a vuestra disposición!